Fuente: @BePrisma
1. Primera actitud: una persona de éxito sabe lo que quiere
“Los que consiguen lo que quieren es porque saben lo que quieren” Esta afirmación parece obvia, pero no lo es en absoluto. Muchas personas van con el piloto automático puesto y se dejan llevar por la inercia de sus vidas en lugar de parar un segundo y reflexionar sobre qué es lo que quieren. Y cuanto más concretas y claras sean nuestras metas, más posibilidades tenemos de conseguirlas, por eso es tan efectivo aplicar gamificación en la evaluación del desempeño.
¿Cómo detectar esta actitud durante una selección? Preguntando por qué quiere trabajar con nosotros. Si un entrevistado quiere formar parte de nuestra empresa, responderá con confianza y argumentará su postura. Si le da igual trabajar aquí que en cualquier otra empresa, no podemos asegurar su compromiso futuro con la empresa.
2. Segunda actitud: una persona de éxito no teme al fracaso
“Los perdedores son ganadores porque aprenden de sus experiencias” Aunque contar con una persona cuya experiencia profesional sea intachable está bien, lo cierto es que tiene más valor haberse caído y levantarse que no haberse caído nunca. Quien evita el fracaso, está evitando el éxito.
¿Cómo detectar esta actitud durante una selección? La falta de tolerancia al fracaso es fácil de detectar si le preguntamos al entrevistado cuál fue la última decisión arriesgada que tomaron y por qué decidieron hacerla. No buscamos a alguien que corra riesgos innecesarios, pero sí a un profesional que sepa asumirlos y minimizar su impacto negativo.
3. Tercera actitud: una persona de éxito tiene una disciplina férrea.
“Una persona de éxito no deja que las distracciones le dispersen de su objetivo.” La constancia es otra de las grandes armas de una persona de éxito. Donde la gran mayoría prefiere lo cómodo a lo necesario, un profesional de éxito perseguirá su objetivo incansablemente, aunque esto implique dejar de lado otras actividades mucho más apetecibles.
¿Cómo detectar esta actitud durante una selección? Podemos saber si una persona es constante antes de seleccionarla si le preguntamos por sus hábitos: ¿sale a correr regularmente? ¿escribe en un blog? Sus hobbies pueden darnos una pista para saber si es constante o abandona con facilidad un proyecto.
4. Cuarta actitud: una persona de éxito es paciente
“No hay metas imposibles, pero sí tiempos imposibles” Roma no se construyó en un solo día. Las personas de éxito lo saben y no desesperan mientras llega el momento de triunfar. Como ya dijo Francisco, “la impaciencia y el cortoplacismo son amantes de la mediocridad“.
¿Cómo detectar esta actitud durante una selección? Un candidato que quiere obtener resultados rápidamente puede que también tenga prisa por entregar un trabajo sin importarle la calidad del producto o despachar un cliente cuanto antes. Un periodo de prueba puede ser muy efectivo para ver cómo es en realidad.
5. Quinta actitud: una persona de éxito es autoresponsable
“La autoresponsabilidad es centrarse en lo que vas a hacer, no en lo que va a pasar” Existen dos tipos de personas: aquellos que están orientados a los resultados versus aquellos que están orientados a las excusas. Una persona de éxito está en el primer grupo y no espera que las circunstancias cambien para conseguir sus objetivos.
¿Cómo detectar esta actitud durante una selección? Si estás entrevistando a una persona y no hace más que culpar a sus excompañeros o a la situación actual de sus desgracias, desconfía. Esa persona no es autoresponsable, es autocomplaciente.
6. Sexta actitud: una persona de éxito está comprometida con su objetivo.
“Los obstáculos son la forma de diferenciar a los que quieren algo de los que lo consiguen”
El compromiso que adquiere una persona de éxito consigo mismo o con un proyecto es siempre del 100 %, hará lo que haga falta el tiempo que haga falta.
¿Cómo detectar esta actitud durante una selección? A veces, los propios procesos de selección actúan de filtro entre las personas comprometidas y las que se rinden al primer obstáculo que aparece.
7. Séptima actitud: una persona de éxito es resiliente
La resiliencia define la capacidad para superar periodos de adversidad o situaciones adversas. Las personas de éxito no dejan que el primer obstáculo o error en el camino les mine la moral.
8. Octava actitud: una persona de éxito es mentalmente sana
“Una persona de éxito tiene diálogos constructivos consigo mismo, no destructivos” La autocrítica destructiva es uno de los mayores frenos para triunfar. Por eso, una persona de éxito no se flagela por cada mala decisión que comete ni se preocupa por los problemas que todavía no han ocurrido.
¿Cómo detectar esta actitud durante una selección? Para que nosotros creamos en una persona, en primer lugar debe creer ella en sí misma. Si bien es cierto que muchas veces las propias empresas se olvidan de felicitar y reforzar la crítica constructiva entre sus trabajadores. Una solución a este problema es ofrecer feedback a través de herramientas como Zeppelean, donde los trabajadores conocerán en todo momento cuál si su desempeño es el correcto y cuáles son sus áreas de mejora.
9. Novena actitud: una persona de éxito está en constante aprendizaje
“El mayor poder de las personas es su capacidad para aprender cosas nuevas”.
10. Décima actitud: una persona de éxito se mueve en entornos enriquecedores.
“Tendemos a imitar inconscientemente a las personas que nos rodean”. Aunque una persona tenga las actitudes anteriores, si está en un entorno tóxico, no conseguirá florecer.
¿Cómo detectar esta actitud durante una selección? Las personas de éxito tienden a rodearse de otras personas comprometidas y que hayan alcanzado sus metas, así que si tienes oportunidad, busca contactos en común con el entrevistado y pide alguna referencia.